miércoles, 10 de octubre de 2007

Dogie!!! (Y un brindis por los viejos tiempos)

Despatarrando al tiempo
salpicado de nostalgia
Luna busca una virtud
escribiendo en el sillón
carcomiendo una esperanza...
Edgar Ruciles, Cáscara de luna.


Conocí a Dogie hace once años, el día de mi cumpleaños. Sacbé, el colectivo estudiantil donde trabajaba (y me divertía enormemente) me preparó una súper fiesta sorpresa. Ya lo había visto antes: tenía un talento bruto para la guitarra y sabía interpretar de una forma bárbara una canción que me encantaba, creo que se llamaba "Mala vida". Entonces él se formó aproximadamente cinco ocasiones para felicitarme por mis diecinueve primaveras.

Dos años después, el nueve de octubre, nos hicimos novios.

Y si lo traigo a colación (sí, con confites y canelones) no es tampoco para quemarlo entre el apreciable séquito de admiradoras que el joven debe tener. Sino para agradecerle por primera vez públicamente, cinco años de esperanza, sonrisas, sorpresas, llanto moqueador, canciones sabrosas, guateques improvisados, conciertos privados, enseñanzas inconclusas y muchísimos sueños desbordados que hizo junto con esta luna que entonces era una niña bastante crédula con lo relacionado a la felicidad. Ahora sé que si fallamos no fue por culpa ni del desamor ni de la ignominia, sino que simplemente hay quienes no nacieron para estar juntos, como tú y yo.

En este momento en que ya mi vida respira y suspira (sin sollozos, usté tranquilo) pues sí, también te recordé ayer y ya nueve años, ¿no? Como dice Arjona, quién diría...

En todo caso, nuevamente gracias. Por las canciones, los regaños, los engaños, las cosas morrocotudamente campechanas que tuvimos y la distancia. Por nuestra hija, Nicole. Prueba superada, Rosas.

P.D.- Y los planes que te conté siguen, sólo que no me voy a Cuernavaca, nos quedamos en el DeFe.


Y si no han escuchado al buen Ruciles, aquí les dejo el link con la página de este cantautor, porque luego me reclamaba que no le hacía promoción...

http://www.myspace.com/ruciles

1 comentario:

MIZPAH dijo...

Cómo no, gracias Rosas por inspirarle tanto.